10 de junio - Día Mundial contra la Falsificación

En un contexto donde el comercio ilícito se expande por todo el mundo y se intensifica con una globalización poco regulada, tanto los Estados como los ciudadanos necesitan hoy más que nunca contar con mecanismos de control sólidos y soberanos. Para facilitar el comercio, es fundamental garantizar su seguridad y evitar que se aprovechen las más mínimas brechas.

Con motivo del Día Mundial contra la Falsificación, instaurado en 1999 y celebrado cada 10 de junio, SICPA reafirma su compromiso en la lucha contra la falsificación y sus consecuencias, apoyándose en su experiencia y en sus diversas soluciones. Para conmemorar esta fecha, lanzamos una serie de artículos que detallan cómo SICPA contribuye a fomentar el comercio legítimo, proteger a los ciudadanos y apoyar a las empresas.

Como pioneros en soluciones de seguridad autenticadas para empresas que operan en un contexto de comercio ilícito, SICPA ofrece estrategias y soluciones integrales y personalizadas para la protección de marca, con el objetivo de establecer relaciones duraderas con cada uno de nuestros clientes.
 

El servicio de Protección de producto y de marca de SICPA atiende a más de 130 clientes en todo el mundo en más de 15 sectores distintos, y protege cada año más de 3000 millones de productos con sus soluciones de marcado.

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Una corporación multinacional que figura en la lista Fortune 500, especializada en productos farmacéuticos y tecnologías médicas, se enfrentaba a retos importantes incluyendo la falsificación de productos, fraudes en devoluciones bajo garantía y riesgos de responsabilidad.
 

Tras un análisis exhaustivo de sus desafíos y de su contexto operativo, nuestros expertos propusieron soluciones a medida, adaptadas a sus necesidades específicas.
 

Por lo tanto, SICPA incorporó elementos de seguridad encubiertos en el empaque primario, como las etiquetas en viales y jeringas, así como en el empaque secundario, como las cajas de cartón y plegables. Gracias a la integración de nuestra solución en sus sistemas internos, la empresa puede ahora autenticar de forma fiable sus productos, mejorar la seguridad de los pacientes y generar información valiosa sobre la propagación mundial de productos falsificados.

En otro caso, colaboramos con una destacada multinacional estadounidense de tecnología informática, que lidiaba con la presencia de productos falsificados y de calidad inferior.
 

Para hacer frente a estos problemas, SICPA introdujo etiquetas de seguridad anti-falsificación, usando tintas de seguridad con colores vivos. Gracias a esta colaboración, mejoraron significativamente la confianza de los consumidores y la reputación de la marca, se reforzó la seguridad en la distribución y las devoluciones, y la empresa consiguió una protección más sólida frente a la falsificación.

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La protección contra la falsificación es fundamental para preservar la integridad de la marca y fortalecer la confianza de los consumidores. Para proteger eficazmente sus productos, las empresas deben incorporar elementos de seguridad avanzados en su estrategia. Estas tecnologías dificultan considerablemente la tarea de los falsificadores.  

Además, educar a los consumidores para que sepan identificar productos auténticos y comprendan los riesgos asociados a las falsificaciones es fundamental, ya que un consumidor informado tiene menos probabilidades de dejarse engañar por productos falsos. 

Asimismo, resulta imprescindible que las marcas colaboren con las fuerzas del orden y los organismos reguladores para combatir las actividades fraudulentas. Este trabajo conjunto fortalece aún más los esfuerzos al garantizar un enfoque coordinado para abordar el problema. 

Por último, garantizar la transparencia y trazabilidad en toda la cadena de suministro ayuda a evitar que productos falsificados ingresen al mercado, preservando así la autenticidad de los productos y la confianza de los consumidores.

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Los consumidores desempeñan un papel fundamental en la lucha contra la falsificación. Pueden protegerse comprando sus productos en canales seguros, como distribuidores autorizados y sitios web oficiales.
 

Involucrar a los consumidores en esta lucha les ayuda a adoptar los reflejos adecuados para protegerse. Por ejemplo, pueden acostumbrarse a verificar los elementos de autenticación visibles en los productos, que confirman su autenticidad. También pueden apoyar a las marcas reportando productos sospechosos a la empresa afectada o a las autoridades.

🔗 Descubra más consejos y estrategias en el artículo: Concienciar a los consumidores y socios sobre la falsificación: consejos y estrategias